Un nuevo estudio de la Universidad Hebrea de Jerusalem ha descubierto que el aceite de larvas de mosca soldado negra tiene potentes propiedades antiinflamatorias en las células inmunes. Una versión modificada de este aceite puede reducir la inflamación sin afectar las funciones inmunes beneficiosas y muestra prometedores avances en la agricultura sostenible y la nutrición animal.
Un equipo de investigadores dirigido por la Profesora Bertha (Betty) Schwartz de la Facultad de Agricultura, Alimentación y Medioambiente ha descubierto poderosas propiedades antiinflamatorias e inmunomoduladoras en el aceite derivado de las larvas de mosca soldado negra (BSFL), un superalimento “de residuo a recurso” que ya está causando sensación en la alimentación animal y los fertilizantes.
Pero ahora, no es solo para pollos y compost. Los hallazgos del equipo, revelan que una forma de aceite de BSFL especialmente tratada, denominada MBSFL, puede reducir las señales inflamatorias clave en las células inmunes sin comprometer las funciones inmunes beneficiosas.
En términos prácticos, esto significa que el MBSFL podría algún día ofrecer una forma natural y sostenible de ayudar a controlar las condiciones relacionadas con la inflamación tanto en animales como, potencialmente, en humanos.
“Siempre estamos buscando formas de reducir nuestra dependencia de los aditivos sintéticos en la agricultura”, dijo la Prof. Schwartz. “Lo emocionante aquí es que el aceite de larvas de mosca soldado negra no solo es un subproducto sostenible, sino que también puede tener un papel genuino en el apoyo a la salud inmunológica animal a través de vías naturales”.
Utilizando modelos avanzados de cultivo celular y análisis fosfoproteómico, el equipo de investigación demostró que el MBSFL amortigua eficazmente las respuestas inmunes hiperactivas al bloquear las vías de señalización inflamatorias, especialmente la notoria vía NF-${\kappa}$B, mientras promueve reguladores metabólicos como PPAR${\delta}$ que están asociados con estados equilibrados y antiinflamatorios.
Los efectos del aceite parecen estar relacionados con su perfil único de ácidos grasos y compuestos bioactivos naturales como el ácido láurico, isoprenoides y oxilipinas, ya conocidos por tener propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas.
¿Qué significa para los agricultores?
- Ganado más sano: al modular la inflamación sin debilitar el sistema inmunológico, el MBSFL podría ayudar a reducir la dependencia de los antibióticos y mejorar la recuperación de infecciones o el estrés.
- Potencial de aditivo alimentario natural: el aceite de BSFL podría desarrollarse como un suplemento alimenticio con beneficios funcionales para la salud, especialmente relevante en la producción avícola y porcina.
- Reciclaje de residuos: dado que las BSFL pueden criarse con residuos orgánicos, esta investigación apoya un modelo de economía circular, transformando los restos de alimentos en soluciones de alto valor para la salud animal.
Si bien el estudio actual se centra en células inmunes humanas en un laboratorio, la Prof. Schwartz señala que estos hallazgos sientan las bases para ensayos en animales de granja y abren nuevas puertas para el desarrollo de alimentos funcionales en la agricultura sostenible.
“Este es un paso adelante en la alineación de las soluciones de salud animal con la gestión ambiental”, agregó. “La mosca soldado negra está demostrando que la naturaleza aún tiene mucho que enseñarnos”.
El artículo de investigación titulado “Impact of Black Soldier Fly Larvae Oil on Immunometabolic Processes”, ya está disponible en el International Journal of Molecular Sciences.
Investigadores:
Hadas Inbart Richter1, Ofer Gover1, Amit Hamburg1, Keren Bendalak2, Tamar Ziv2, Betty Schwartz1.
Instituciones:
1) Instituto de Bioquímica, Ciencia de los Alimentos y Nutrición, Escuela de Ciencias Nutricionales, Facultad de Agricultura, Alimentación y Medioambiente, Universidad Hebrea de Jerusalem.
2) Centro de Proteómica Smoler, Instituto Tecnológico Technion-Israel.