A raíz del reciente y horrible ataque terrorista perpetrado por Hamas contra civiles israelíes, la Asociación de Universidades de Israel, que incluye a instituciones líderes como la Universidad Hebrea, ha publicado una carta conjunta denunciando la violencia y pidiendo a las instituciones académicas de todo el mundo que se unan a ellas para condenar estos actos atroces. Esta carta sirve como un alegato a favor de la unidad y una posición firme contra el terrorismo, haciendo hincapié en que la educación y la academia deben ser pilares de la responsabilidad moral, rechazando activamente los actos de violencia contra la población civil.
La carta, dirigida a colegas y directores de universidades de todo el mundo, destaca la brutalidad sin precedentes del ataque y busca subrayar la importancia de una condena inequívoca.
El 7 de octubre, Hamás lanzó un ataque sorpresa con cohetes contra Israel desde Gaza, llegando hasta las zonas de Tel Aviv y Jerusalem. Al mismo tiempo, militantes de Hamás y la Yihad Islámica irrumpieron en la frontera, masacrando brutalmente a civiles, entre ellos mujeres, ancianos, niños y familias jóvenes.
Entre las víctimas había asistentes a un festival de música, activistas por la paz, ancianos de más de 80 años y niños pequeños. Se perdieron más de 1.300 vidas inocentes, y muchas más resultaron heridas o fueron cautivas. Perturbadores videos de Gaza mostraban actos de crueldad, incluidas violaciones y torturas, todos los cuales fueron recibidos con vítores por parte de los atacantes.
La población civil israelí, compuesta por personas de diversos orígenes religiosos y étnicos, incluidas las comunidades judía, musulmana y cristiana, fue objeto de ataques terroristas y disparos indiscriminados de cohetes. Esta situación va más allá del ámbito de un conflicto ordinario; Es un acto de violencia bárbara que exige una condena universal.
El profesor Asher Cohen, presidente de la Universidad Hebrea, demostró su compromiso con la responsabilidad compartida al firmar una carta conjunta con otros presidentes de universidades israelíes.
En la carta, estos presidentes afirmaron colectivamente que no hay lugar para la equivalencia moral en la situación actual. Rechazaron la noción de que hay “gente buena en ambos lados”, enfatizando que “este fue un acto de violencia bárbara singular al que hay que renunciar por completo”. Las acciones de Hamás y la Yihad Islámica se caracterizaron por ser crueles y bárbaras, estableciendo paralelismos con organizaciones notorias como ISIS, Al Qaeda, los talibanes y el Estado Islámico.
La carta conjunta tiene como objetivo subrayar la extrema gravedad de este acto y subrayar la necesidad de rechazar cualquier apoyo a tales organizaciones terroristas dentro de las sociedades democráticas occidentales.
El liderazgo académico hace un llamado a los líderes de la educación superior y la academia en todo el mundo para que participen activamente en la educación de sus comunidades sobre los valores que defienden. Si bien la libertad de expresión y la libertad académica son principios muy apreciados, debe haber una postura unificada contra la violencia bárbara perpetrada contra la población civil. La carta destaca la responsabilidad compartida de las universidades y las instituciones educativas en la formación de los líderes del mañana y les pide que denuncien los actos de violencia contra civiles inocentes.
Las universidades de Israel expresan su gratitud por el apoyo y la preocupación recibidos de colegas de todo el mundo e instan a los líderes académicos de todo el mundo a que se unan a ellos para denunciar estos actos de terror. Juntos, se solidarizarán, unidos contra el terrorismo y comprometidos con la promoción de la paz, la tolerancia y la justicia.