La compleja dinámica de la violencia entre colonos judíos y árabes en Israel

Un estudio profundiza sobre el problema de la violencia de los colonos judíos en Israel. Se encontró una correlación directa entre la escalada de violencia árabe grave y la violencia judía, así como una relación negativa entre las acciones estatales contra la violencia árabe, lo que sugiere una respuesta de autodefensa. Al mismo tiempo, las respuestas formales contra la violencia judía tienden a asociarse con aumentos en lugar de disminuciones. Los resultados subrayan la importancia de contar con enfoques coherentes y equilibrados de aplicación de la ley.

La violencia de los colonos judíos en Israel y sus territorios se ha convertido en un punto focal en los medios de comunicación y para los responsables políticos, pero la investigación sobre el tema es escasa. Un interesante estudio realizado por el Dr. Michael Wolfowicz y la estudiante de doctorado Esther Salama, del Instituto de Criminología de la Facultad de Derecho de la Universidad Hebrea de Jerusalem, ha revelado ideas críticas sobre la compleja interacción entre la violencia, las respuestas formales e informales y el contexto sociopolítico más amplio.

El estudio, que abarca el período 2009-2022, combina datos de la Agencia de Seguridad de Israel, la Autoridad Palestina, las Naciones Unidas y fuentes abiertas.
Empleando modelos de Binomio Negativo Generalizado y modelos OLS de Newey-West, la investigación explora la hipótesis de que la violencia judía funciona como una forma de reacción social, autoayuda y control social, influenciada por la violencia árabe en conjunción con la inacción del gobierno y la selectividad en sus respuestas.

El estudio revela una correlación directa en la que el aumento de la violencia árabe grave conduce a un aumento de la violencia judía, lo que proporciona pruebas de que la violencia judía puede ser, al menos en parte, una respuesta a las amenazas percibidas y un medio de autodefensa.

Además, la violencia judía tiende a disminuir cuando las respuestas formales a la violencia árabe son más pronunciadas. Sin embargo, el estudio destaca las consecuencias no deseadas de las duras medidas contra la violencia judía, en particular las órdenes de detención administrativa, que pueden exacerbar el problema en lugar de disuadirlo. Como tal, los resultados enfatizan la importancia de un enfoque coherente y equilibrado para la aplicación de la ley y la justicia.

La investigación subraya la utilidad de los marcos criminológicos tradicionales para comprender la violencia colectiva, específicamente el “vigilantismo”, como en el caso de la violencia judía. Trazando paralelismos con estudios anteriores sobre el extremismo violento y los delitos de odio, los hallazgos sugieren que las percepciones comunes de las causas de la violencia colectiva pueden reflejar sus efectos.

El estudio también hace hincapié en la necesidad de adoptar enfoques equilibrados y basados en datos empíricos para reducir la violencia colectiva, y advierte contra el carácter contraproducente de las medidas excesivamente duras.
Si bien las medidas ordinarias de incapacitación tienen posibilidades de reducciones pequeñas pero significativas, las medidas orientadas a la lucha contra el terrorismo pueden no ser tan eficaces para frenar el vigilantismo y, de hecho, pueden exacerbar la situación.

El trabajo de investigación titulado “Returning to the Wild West: Jewish violence, social reaction, self-help and social control” ya está disponible en Anales Internacionales de Criminología.

Investigadores:
Michael Wolfowicz, Esther Salama.
Instituto de Criminología, Facultad de Derecho, Universidad Hebrea de Jerusalem.