Un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad Hebrea ha identificado verticilos de huso de 12.000 años de antigüedad, herramientas tempranas utilizadas para hilar fibras en hilo.
El estudio, publicado recientemente en PLOS ONE, fue dirigido por Talia Yashuv y la profesora Leore Grosman del Laboratorio de Arqueología Computacional del Instituto de Arqueología de la Universidad Hebrea. presenta un método innovador para estudiar objetos perforados, basado en modelos digitales en 3D de las piedras y sus agujeros negativos, donde los autores describen más de un centenar de guijarros, en su mayoría de piedra caliza, que presentan una forma circular perforada por un agujero central.
Debido a esta estructura y composición, los autores deducen que las piedras probablemente se usaron como espirales de huso, una hipótesis que también se apoya en el hilado exitoso del lino utilizando réplicas de las piedras.
Los verticilos de huso, objetos redondos y pesados que están unidos a un palo de huso, forman un dispositivo similar a una rueda y un eje para ayudar a que el huso gire más rápido y durante más tiempo, que se utilizaba como herramienta para girar y crear hilos, especialmente de lana o lino.
Este descubrimiento marca la evidencia más temprana conocida de esta tecnología de hilado rápido en el Levante, precediendo a las herramientas textiles previamente conocidas en 4.000 años y destacando una etapa importante en la innovación humana.
La profesora Grosman señala que “Estas piedras perforadas natufienses son en realidad las primeras ruedas en forma y función: un objeto redondo con un agujero en el centro conectado a un eje giratorio, utilizado mucho antes de la aparición de la rueda con fines de transporte”. Este uso temprano allanó el camino para futuras innovaciones rotacionales basadas en giras, avances clave que revolucionaron la historia tecnológica de la humanidad, como el torno de alfarero y la rueda de carro que apareció hace 6.000 años.
Video: 1.- Procesamiento del modelo 3D. | 2.- Uso de la replicación para hilar. | Crédito: Liron Narunsky
El yacimiento de Nahal Ein Gev II, con sus estructuras permanentes, enterramientos enlucidos con cal y herramientas diversificadas, ofrece una rara visión del final de la cultura natufiense y de la transición de una sociedad de cazadores-recolectores a una agrícola.
Los nuevos hallazgos subrayan cómo las innovaciones tecnológicas son una fuerza impulsora importante en los procesos de neolitización. Este estudio no solo amplía nuestra comprensión de la innovación tecnológica, sino que también muestra cómo las herramientas de investigación avanzadas revelan conocimientos sobre la artesanía prehistórica, lo que subraya el impulso perdurable de la humanidad por la innovación.
El documento de investigación titulado “12,000-year-old spindle whorls and the innovation of wheeled rotational technologies”, ya está disponible en PLOS.
Investigadores:
Talia Yashub, Leore Grossman
Laboratorio de Arqueología Computacional, Instituto de Arqueología, Universidad Hebrea de Jerusalem.