Un nuevo estudio revela una conexión significativa entre las bacterias orales y el desarrollo del cáncer de páncreas en ratones y arroja luz sobre un vínculo previamente reconocido entre la salud bucal y el cáncer de páncreas, una de las formas más mortales de cáncer.
El profesor Gabriel Nussbaum y su equipo del Instituto de Investigación Biomédica y Oral de la Escuela de Medicina Dental de la Universidad Hebrea-Hadassah, han publicado recientemente una investigación inédita en la revista Gut, que descubre un vínculo fundamental entre las bacterias orales y la aparición de cáncer de páncreas en ratones.
Su estudio profundiza en la intrincada relación entre la microbiota oral, en particular Porphyromonas gingivalis, y la aceleración del desarrollo del cáncer de páncreas, ofreciendo información crucial sobre la detección precoz, la prevención y las posibles vías terapéuticas.
El adenocarcinoma ductal pancreático (PDAC) se ha relacionado con la presencia de Porphyromonas gingivalis, una bacteria anaeróbica prevalente conocida por su asociación con la enfermedad periodontal. Aprovechando las pistas epidemiológicas, el equipo del profesor Nussbaum se embarcó en un viaje para dilucidar el potencial de P. gingivalis para impulsar la progresión del cáncer de páncreas.
Su investigación consistió en un examen exhaustivo de la translocación de P. gingivalis de la cavidad oral al páncreas utilizando modelos de ratón.
Al introducir la bacteria en ratones modificados genéticamente predispuestos a PDAC, el equipo descubrió pruebas convincentes de un desarrollo acelerado del cáncer.
Los hallazgos clave del estudio indican que se encontró P. gingivalis viable en el páncreas de ratones sanos después de aplicarlo en las encías, y la exposición prolongada causó cambios en el páncreas, afectando su equilibrio microbiano.
Además, la aplicación de P. gingivalis por vía oral aceleró la progresión de anomalías pancreáticas tempranas a cáncer de páncreas en ratones con una mutación genética específica. La investigación también mostró que esta mutación genética ayudó a P. gingivalis a sobrevivir dentro de las células, y las bacterias apoyaron la supervivencia de las células de cáncer de páncreas incluso cuando las condiciones eran difíciles.
Los descubrimientos del profesor Nussbaum y su equipo enfatizan un vínculo directo entre P. gingivalis y el desarrollo de cáncer de páncreas en ratones, ofreciendo información significativa sobre cómo progresa esta enfermedad.
“El estudio subraya la importancia de tener en cuenta la salud bucal para comprender y abordar el cáncer de páncreas”, dice el profesor Gabriel Nussbaum, investigador principal del Instituto de Investigación Biomédica y Oral. “Al explorar el papel de bacterias como P. gingivalis, no solo estamos arrojando luz sobre los posibles factores de riesgo, sino que también estamos descubriendo nuevas vías de intervención y tratamiento”.
Los hallazgos sugieren que existe una posibilidad real de que la enfermedad de las encías pueda estar relacionada con el riesgo de cáncer de páncreas, lo que enfatiza cómo las bacterias afectan directamente a este vínculo.
Existe potencial en centrarse en las bacterias dentro de las células como una forma de reducir el riesgo de cáncer de páncreas o de mejorar los tratamientos existentes para él.
Estos conocimientos abren vías para futuras investigaciones y podrían conducir a estrategias más eficaces para prevenir y tratar el cáncer de páncreas.
“Oral bacteria accelerate pancreatic cancer development in mice”, ya está disponible en Gut.